"La vida es demasiado fabulosa, para ser fabulada"
Dominique La Pierre



viernes, 25 de mayo de 2012

"Los relámpagos de agosto"

Nunca, hasta hace cuatro días, había leído a un autor masculino mexicano. De hecho fuera de Paz y Carlos Fuentes, la verdad es que ni siquiera ubico el nombre de los demás. Pecado de mujer he de confesarlo, pues no me pasa lo mismo con las autoras mexicanas: Aún a qué olía "Como agua para cholocate" de Laura Esquivel; la explosión de aventura y sensualidad que me provocó Sara Sefchovich con su "Demasiado amor"; o qué decir de la entrañable Angeles Mastretta con su deliciosos retratos de mujeres hermosas, tanto en "Arrancame la vida" como en "Mujeres de ojos grandes", ambos leídos y releídos con inmenso placer por esta fémina romántica en búsqueda de identidad. Hasta la pícara Guadalupe Loaeza con sus frescas historias burguesas, ha tenido un espacio en mis lecturas de tarde.... Y sin embargo para los autores masculinos, ni cinco minutos, pero como ya lo había dicho, este pecado ha empezado a ser reparado hace pocos días, y el resultado me ha dejado un muy grato sabor de boca.

Amante de los "corrosivos alegatos a favor del humor sarcástico y la ironía antihistórica", Jorge Ibargüengoitia y sus "Relámpagos de Agosto, fue el elegido para iniciar la aventura de descubrir a mis compatriotas escritores.  Ibargüengoitia nació en la ciuad de Guanajuato, México el 22 de enero de 1928 y murió en Madrid el 27 de noviembre de 1983. Su obra se caracteriza por la agudeza certera con la que exhibe tanto los vicios de sus personajes, como las caóticas situaciones políticas en las que se encuentran.



Esta serena y humorística mirada del autor a los personajes políticos mexicanos, me hizo comprender con gran claridad la realidad  de mi país, pues si bien la obra se sitúa en los años de Calles, "Jefe máximo de la revolución", presidente de méxico en el período de 1924 a 1928, fundador del Banco de México, fundador de lo que ahora es el PRI, es decir el partído en el poder por más de 50 años, iniciador de la Revolución Cristera, etc, etc, etc...., la realidad es que el territorio mexicano se sigue moviendo exactamente en el mismo circo, por los mismos intereses, con la misma guerra sucia y el mismo, o peor desmadre... La única diferencia ahora es que los caudillos del país ya no están en cargos de gobierno, sino abiertamente en la mafia o en iniciativa privada. Visto de esta manera, Ibargüengoitia no retrata la dinámica de la vida política del país, sino el carácter del mexicano, en la ejecución de cualquier empresa... carácter que perdura hasta nuestros días.

Al percatarme de este hecho, me apetece ser sociologa, para tratar de entender por qué somos así y más aún, por qué actuamos de esta manera... posiblemente algún día lo logre descifrar, mientras tanto mantendré cerca a mi nuevo amigo y sus "Relámpagos de agosto", este relato a modo de memorias de un general revolucionario caido en desgracia, que con mordaz gracia da nueva luz al tantas veces desesperante proceder de mi gente, en lo que a construcción de un proyecto de nación se refiere.



domingo, 20 de mayo de 2012

Memoria de mis Putas tristes...un cálido encuentro

Esta mañana, tras mi muy necesaria sesión de meditación matutina, terminé de leer "Memoria de mis putas tristes", de García Marquez. Mi viaje a través de sus páginas fue muy distinto al experimentado con los relatos del buen "Gabo" en otras ocasiones, por primera vez hubo momentos que me resultaron muy desagradables, sin embargo la historia me atrapó y lo terminé sin dificultad... Sus últimas páginas me aportaron gran luz, posiblemente por el contraste de hechos.

Mientras hago la meditación matutina, busco herramientas que me ayuden a conectarme con "la divinidad que hay en mí", ejercicios de introspección y voluntad encaminados a fortalecer los centros de poder del propio cuerpo, a fin de armonizar la vida, con LA VIDA y seguir creciendo...

Las páginas de esta cálida novela, me llevaron a conectarme con la debilidad que hay no sólo en mí, sino en todos los seres humanos.Observando con ternura al "sabio triste" que narra sus memorias, me encontré a mí en mis tantos momentos de amor infantil idealizado, en mis nostalgias solitarias, en mis pasiones ansiosas, en mis caprichos innsanos...

El observante no juzga, sólo descubre y reconoce mientras contempla algo a a alguien desde la serenidad y sonrie.... Posiblemente por eso el narrador no tiene nombre o al menos yo no logro recordarlo, me apetece pensar que de un modo u otro, todos nos encontramos en él celebrando la vida de los noventa a los cien, sabios viejos todos, llenos de amor, ilusión, pasión y búsqueda. Tan inquietos como a los veinte, tan vivos como a los quince, tan niños como a los doce... mientras vivos, con mucho que experimentar, con todo por aprender. Disfrutando cada dolor y cada dicha con la esperanza de que vengan, cientos más.

Finalmente, "la vida es" y todo está bien...



lunes, 14 de mayo de 2012

Intrusa

Y me  pregunto por qué no estás aquí,
por qué te fuiste... por qué me echaste de tu lado,
cuando la realidad es que nunca estuviste,
nunca viniste... jamás fuiste líado a mí.

Yo te busqué, acorralé e intenté atraparte,
"como ladrón en la noche", irrumpí en tu vida
sin darte tiempo a reaccionar...

Intrusa violenta, llegué a tu alma sin ser invitada...
caprichosa y cegada, reclamé tu casa como mía,
celé tu amor y compañía, forcé tu mano para sostener la mía...

Mas no fui yo, fue una niña pequeñita
un espectro solitario convencido, de no poder ganar amor.

Y ahora ya sé que nunca estuviste, jamás viniste ni fuiste líado a mí,
yo te busqué, acorralé, intenté atraparte...
tu solamente te liberaste, me liberaste...